martes, marzo 21, 2006

Nada te será negado

Es increíble que mis peticiones a un Dios en el que no he confiado casi nunca se hagan realidad, lo que si es creíble es que al hacerse realidad lo hagan como una patada en las huevas proveniente de aquel ser contra mí, golpe que me hace caer en cuenta que no se pedir las cosas y que una vez más salen al revés, que son al derecho para Él y es hasta obvio, pues mi cielo es su piso y mi ilusión es su diversión.

Hoy no fue un buen día y Dios logró callarme la jeta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

sera que no sabe pedir as coas?....o que no sabe loq eu quiere...realamente