sagrada abstinencia y delirio tembloroso

A Dios se le acabó el brandy
y detuvo su creación
y llora de vez en cuando
y de vez en cuando también prepara arroz
y se lo come aunque esté quemado
y se ríe de lo frío que puede ser el sol
y vomita en las canecas
y de nuevo prepara arroz
y se compra un camión
y una autopista
y una bella mujer
y se tira por un abismo
y luego hace una canción.

A Dios se le acabó el brandy
y une con líneas las estrellas
y dibuja un cohete
y le pone nombre de jabón
y lo manda a la mierda
y el cohete no regresa
y entonces dibuja un camión.

A Dios se le acabó el brandy
y las pastillitas de colores
y las ganas de ser Dios
y no sueña en las noches
y la suela de los zapatos desapareció.

A Dios se le acabó el brandy
y sacó a la basura su colchón
y pintó en la pared un espejo
y se miró
y se asustó
y salió a cortar el césped
y se armó un cigarro
y se fumó sus ganas de brandy
y se ahogo en espuma de afeitar

A Dios se le acabó el brandy
y las ganas de vivir.